Mariano Fuentes Lira

«Manolo» Como lo llamaban en la intimidad de sus amigos nace un 8 de Setiembre de hace 100 años, en el Distrito de Zurite de la Provincia de Anta Departamento del Cusco desde muy muchacho se inclina por las expresiones artísticas, especialmente por el dibujo y pintura.
Tempranamente despiertan su Preocupación hacia la injusticia social, la explotación de los poderosos contra los pobres y joven aun participa de algunas revuelta políticas, interviene en las luchas sociales en sus ansias por los cambios, se convierte en el joven protagonista de los movimientos sociales, ayuda a organizarse a los trabajadores explotados en los centros de producción contra los excesos de los patrones y dueños de las empresas señalados como explotadores y abusivos.
Llega la etapa oscura de los exilios políticos y debido a ello, Mariano llegaría a las Pampas Argentinas donde se relacionaría con pintores del lugar conociendo además a diferentes artistas extranjeros.
Ingresa a Bolivia y conoce a la escultora Marina Núñez del Prado, afamada artista boliviana, empieza a desarrollar la pintura mural y la pintura a cabdcte haciendo (le su personaje principal al trabajador obrero, originario del lugar, en su pintura retrata el espíritu luchador del hombre del altiplano concentrando su vivienda en Warisata – Bolivia, donde radica hasta el año de 1951. Año en que vuelve al Cusco, y están en su explendor los grandes pensadores cusqueños como Uriel García, 1-lurberto Vidal Unda, entre otros, el mismo año, asume la dirección de la Escuela y emprende la organización de la naciente ERBA sobre la base de la incipiente Escuela de Artes y Oficios hasta hacer de ella la actual Escuela Superior de Bellas Artes.
Desarrolló una batalla dura para cambiar el pensamiento del artista tradicional, del artista artesano que pegados a sus ideas desarrollasen nuevas expresiones artísticas. Su caballerosidad, su profundo respeto por los demás y Ja humildad de Maestro, hicieron que Mariano Fuentes Lira sea acogido gratamente a su retorno en el entorno artístico y académico, revolucionando todo el sistema de enseñanza artística convirtiendo a la ERBA en una institución académica, artística y de régimen estricto, asíla “Escuela Regional de Bellas Artes” – ERBA, donde se formaron – como sus discípulos- muchos y bien aprovechados artistas plásticos como justo Béjar Navarro, Alberto Quintanilla Mar, Antonio Huillca Huallpa, Abrahan Cano Luza, entre otros que han desarrollado el arte puro y el arte de la conservación y restauración, contribuyendo al rescate de nuestro patrimonio artístico cultural.
Mariano, es el representante del indigenismo en Cusco: la época del romanticismo de entonces lo lleva a desarrollar la pintura indigenista con la que identifica su producción artística plasmando amor por lo andino.
La obra del Maestro tiene a importantes instituciones como fuentes y testimonios de su vida entre ellas e Departamental del cusco, La Federación de Trabajadores – FDTC, antigua Federación Obren Departamental, al Colegio Nacional de Ciencias, al Instituto Americano de Arte entre otras entidades.
La vida, obra y trascendencia del insigne Maestro cusqueño de las Artes Visuales, tiene continuidad en las generaciones de artistas formados en la ESABAC, emulando sus facetas artístico culturales, educacionales y políticas que le tocó vivir dejando huella, para significar -en la actualidad- un ejemplo a seguir. La pasión del Maestro por el arte y su dedicación a la Escuela de Bellas Artes de Cusco, lo convirtieron en un personaje muy especial de aquellos que por propia convicción escriben las páginas de la historia del arte.